Sergio Vargas, acompañado por la Orquesta Sinfónica Nacional, interpretó este miércoles 10 de mayo el Concierto para piano núm. 9 en mi bemol mayor.
CIUDAD DE MÉXICO.- Sergio Vargas, pianista prodigio de 13 años, se presentó con gran éxito la noche del viernes 10 de mayo en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes, al lado de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), y bajo la batuta del español Andrés Salado, con el Concierto para piano núm. 9 en mi bemol mayor.
Prodigio doble la de esa noche en la que se festejaba a las mamás en su día: escuchar a Mozart, un bálsamo en medio del ruido musical del momento, y deleitarse con la versión del joven pianista mexicano.
Al final de su ejecución, Vargas salió nuevamente al escenario para recibir aplausos y tocar un fragmento de las Variaciones Goldberg de Johann Sebastian Bach. El público ovacionó al joven pianista por la destreza con que ejecutó esta pieza, considerada por muchos de naturaleza musical compleja.
Por su parte, la OSN inició el decimoprimer programa de su temporada 2019 con Ionización de Edgar Varèse, compuesto para 13 percusionistas y 37 diferentes tipos de percusiones. Es una obra transgresora que fue estrenada en 1929, en plena crisis económica en Estados Unidos.
Para cerrar la noche, la agrupación del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura interpretó la Sinfonía núm. 7 en la mayor de Ludwig van Beethoven, una obra que, a decir del director huésped, invita a brincar de alegría (Con información de Prensa del INBAL).
