“Yo soy el eco del cosmos. Lo que el cosmos me manda, yo lo transmuto en mi propio universo, lo manifiesto, y se lo regreso”.
Francisco Monterrosa.
CIUDAD DE MÉXICO.- Entre anécdotas, color y simbolismo oaxaqueño, la tarde del jueves 24 de octubre, se llevó a cabo la inauguración de la exposición plástica de Francisco Monterrosa “El rincón de las luciérnagas”, en el Vestíbulo “A” del Centro Cultural Jaime Torres Bodet del Instituto Politécnico Nacional (IPN), en Zacatenco.
En el marco de los festejos del 55 aniversario del Centro Cultural Torres Bodet, y en representación del Dr. Mario Alberto Rodríguez Casas, Director General del IPN, el Dr. Adolfo Escamilla Esquivel, Secretario de Servicios Educativos, dio la bienvenida a los presentes y mencionó que el Maestro Monterrosa “…es uno de los referentes más importantes de la plástica juchiteca, y hoy nos maravilla con una exhibición llena de color, personajes oníricos y fantásticos”.
“Para el Instituto es un gusto recibirlo de nuevo, anteriormente en 1998, abrió por primera vez sus puertas a un joven Francisco López Monterrosa (…) como parte de una exposición colectiva con artistas de la plástica oaxaqueña (…) hoy regresa en una exposición individual y como deben regresar los hijos predilectos, por la puerta grande”.
El Maestro Monterrosa se mostró muy agradecido con el IPN. “Cada vez que hago una obra, hago una leyenda, un poema (…) Yo se a qué vine a este mundo, y lo estamos manifestando para cada uno de ustedes. Gracias también a a todos ustedes por estar con nosotros y les digo que cada una de las luciérnagas es parte de mi obra, parte de la metáfora…”.
Por su parte, la Lic. María de Lourdes Pérez Guzmán, Directora de Difusión y Fomento a la Cultura del Instituto Politécnico Nacional, compartió con los asistentes su emoción ante la plástica, filosofía de vida, y sensibilidad de Francisco Monterrosa, lo cual pudo constatar en una conversación que sostuvo previamente con él.
“El Maestro Monterrosa no solamente es un gran artista, sino también es un gran poeta (…) que transmite un gran respeto a la humanidad, un respeto a la naturaleza, un respeto a todas las personas que ha ido tocando en su vida, y sobre todo tiene un enorme corazón, porque todo lo que ha aprendido lo quiere dar”. Así mismo la Lic. Pérez Guzmán mencionó que el Maestro está interesado en dar un taller en el Instituto.
Nacido el 10 de octubre de 1968, en Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, Francisco López Monterrosa fue el sexto de nueve hijos. El día de su alumbramiento comenzó una mágica historia de luciérnagas en evolución. Así lo platicó el Maestro en entrevista para Aleph Multimedios:
“El universo me puso. Porque desde que nací, nací con la partera que trajo a todo el pueblo de Juchitán (…) Y mi abuelo estuvo observando todo lo que estaba pasando, el era chamán, yo nací hasta la una quince de la madrugada; cuando nací le dijo a mi mamá -Este Niño va a ser muy grande, trae su luz propia…”.
Cuando era pequeño, Francisco Monterrosa solía a pasear por los campos para recolectar insectos, un día atrapó varias luciérnagas en una bolsa y se las llevó a su mamá, diciéndole que se trataba de “un obsequio de las estrellas”, su madre las liberó con ternura para que volvieran a su sitio, mientras, Francisco observaba el germen de sus primeras constelaciones surrealistas.
“Esas luciérnagas poco a poco empezaron a dar forma a diferentes constelaciones, y esas constelaciones yo las voy llevando a mi vida por medio de mi obra, es la evolución que voy teniendo poco a poco”.
“Las luciérnagas tienen luz propia. Yo siempre hablo de una historia, de una metáfora en cada una de mis piezas, y eso es una luciérnaga que tiene luz; con el tiempo se convierte en ciencia, se convierte en cualquier cosa, para poder hablar dentro del contexto de la plástica”.
Hablar de la plástica juchiteca, siempre remite a dos grandes nombres, cuyas obras se convirtieron en referentes de la cultura y el arte nacional en el mundo; pero, además del lugar de nacimiento, y el nombre, Francisco López Toledo y Francisco López Monterrosa compartieron una bonita amistad, cada uno con su propio estilo en la plástica.
“Somos dos juchitecos con diferentes máscaras (…) Toledo dijo yo soy Francisco Toledo, yo soy juchiteco, estos animales son de mi tierra y voy a hablar del erotismo de estos animales. Bueno, yo también soy de Juchitán y hablo de una mitología muy propia, pero universal”.
La muestra “El rincón de las luciérnagas” está integrada por 55 piezas donde destacan el óleo, grabado y acuarela, y estará abierta al público hasta el 13 de diciembre, en el Centro Cultural Jaime Torres Bodet, de Zacatenco. Entrada libre.
