Fue a partir del 2002, que el Fondo Internacional para el Bienestar Animal estableció el 8 de agosto como el Día Internacional del Gato.
Por su enigmático comportamiento, características físicas y elegancia de sus movimientos, el gato resulta muy atractivo para los humanos. Actualmente existe una gran variedad de gatos domésticos, en cuanto a pelaje y corpulencia se refiere, esto podría deberse a la posible cruza entre antiguos felinos domésticos y gatos monteses.
De acuerdo con investigadores de la UNAM, el surgimiento del gato doméstico podría ubicarse hace 4,600 años; las primeras evidencias de su domesticación han sido localizadas en Egipto aproximadamente en 2,600 antes de Cristo, donde se les concebía como deidades e incluso existen vestigios de algunos ejemplares momificados.
Tal como menciona el investigador Ricardo Téllez Girón López, “La transformación de un animal originalmente predador en uno útil, con el cual es posible convivir, fue de suma utilidad para los hombres y significó una modificación en el trato hacia los felinos”.
En el antiguo Egipto, los gatos eran venerados por su extraordinaria capacidad de caza, que mantenía las comunidades humanas libres de roedores. Ejemplo de su importancia es Bubastis, la Ciudad del Gato, donde se rindió culto más de 2 mil años a Bastet, la diosa gato (hasta que con el poderío del cristianismo este tipo de cultos fue prohibido).
A tal grado era importante la presencia del gato en Egipto, que cuando morían los embalsamaban e incluso las familias se rasuraban las cejas en señal de luto. Fueron los comerciantes fenicios los responsables de que algunos ejemplares se distribuyeran por otras latitudes. A lo largo de los primeros 400 años del cristianismo, los gatos comenzaron a tomar presencia en China y Japón.
Antes de ser perseguidos durante la Edad Media, los gatos llegaron a vivir en palacios e iglesias, incluso existen representaciones de la virgen María acompañada por gatos de pelajes en color claro. Fue durante el siglo XIII que se comenzó a relacionar la imagen gatuna con la brujería, debido a que eran animales de compañía de mujeres mayores acusadas de hechicería.
Téllez Girón López indica que “una de las razones fundamentales sobre las que se estableció el pacto entre los gatos domésticos y el hombre fue su capacidad para cazar a la rata: portadora de la peste”. A raíz de la persecución de los gatos en la Edad Media, las ratas se propagaron y crecieron las epidemias de peste.
A lo largo de los últimos 2 siglos, la imagen del gato se recuperó y poco a poco se le ha ido aceptando nuevamente en sociedad; al grado de que en algunos países europeos y en los Estados Unidos existe una tendencia a la baja en la adopción de perros, favoreciendo cada vez más la presencia de los gatos como animales de compañía.
Fue a partir del 2002, que el Fondo Internacional para el Bienestar Animal estableció el 8 de agosto como el Día Internacional del Gato. Con esta fecha se busca recordar que a pesar de que los gatos son una compañía, por la persistencia de algunos de sus comportamientos considerados silvestres, requieren de atenciones especiales.
